Google pretende mejorar su imagen encabezando una cruzada por la privacidad en Internet.
De hecho, a mediados de marzo la compañía comenzó a limitar el tiempo de almacenaje de la información a 18 meses, a los que posteriormente agregó una política de anonimato.
De este modo, y en un intento por pasar de ser el villano a convertirse en el paladín de la privacidad, Google anunciará en forma pública una propuesta para establecer un nuevo marco regulador a nivel internacional que sustituya a la obsoleta regulación vigente, creada en 1980 cuando ni siquiera existía la web.
Sin embargo, cabe destacar que la reglamentación de la APEC se basa en principios muy generales, como notificar a los individuos cuando sus datos sean almacenados, o cuáles son las limitaciones en su recolección, por lo que resulta algo vaga y no excesivamente restrictiva.
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